martes, 30 de agosto de 2011

El Ananga Ranga de Kalyana Malla

El Ananga-Ranga es un tratado hindú sobre sexualidad. A diferencia del mejor conocido Kamasutra, éste no es un manual de civilidad o buenas costumbres en la cama, sino un libro dirigido a las parejas casadas para ayudarles a conservar la armonía sexual.

Escrito en el siglo 15 o 16, el Ananga-Ranga o "Barco en el mar del amor" es un tratado moderno con consejos para prevenir la separacion de las parejas casadas o para mostrarles como vivir felizmente sus vidas juntos. Se trata de prevenir el adulterio a través de la satisfacción sexual mutua. El autor advierte que la monotonía y la falta de variedad son peligrosas y que su libro muestra cómo variar el disfrute de los cuerpos.

Variando las prácticas, un hombre puede vivir como si tuviera 32 mujeres distintas (sin tener que darles de tragar y aguantarlas, agrega mi imaginario "yo misógino") El libro está sin duda basado en los manuales antiguos, pero su novedad además del objetivo de la escritura, es el énfasis que pone en la etica, la espiritualidad y el conocimiento divino.

Fue traducido al inglés en el año 1885, editado por Sir Richard Francis Burton como parte de sus traducciones de antiguos manuscritos. El tratado da una importancia alta al juego previo y a la seducción, para que la pareja no se canse uno del otro.

El libro consta de 10 capítulos; en cierta forma es similar a otros tratados sexuales, pero con un objetivo distinto.

CAPITULO 1.- Acerca de las cuatro clases de mujeres y el placer. Las mujeres se clasifican por su temperamento y el tamaño de sus genitales.

CAPITULO 2.- Las zonas sensibles de la mujer

CAPITULO 3 .- Las diferentes clases de hombres y mujeres, consejos para cada tipo de pareja.

CAPITULO 4 .- Cualidades, características y temperamentos de las mujeres

CAPITULO 5.- Características de las mujeres según las diferentes regiones (de la India)

CAPITULO 6.- Trabajos externos: acelerar el orgasmo, retrasar la eyaculación, aumentar el pene, el deseo sexual, disminuir el yoni, belleza, embarazo, aborto, parto, anticoncepción.

CAPITULO 7 .- Atracción, seducción, amor, amistad.

CAPITULO 8 .- Sobre la mujer, el hombre, la familia, el adulterio.
CAPITULO 9 .- Placeres externos que preceden al placer interno: abrazos, besos, rasguños, mordiscos, cabello, golpes, nalgadas, etc

CAPITULO 10 .- Los goces internos posturas y vida en pareja

El libro pone mucho énfasis en el manejo que se debe de hacer de la diferencia entre hombre y mujeres en los tiempos de la excitación sexual. El manual fue escrito por el poeta para  instruir en los secretos amorosos a una chica de la casta de los poderosos


Posición de la rueda del kama: ideal para las parejas voluptuosas.  El hombre se sienta entre las piernas de la mujer y luego extiende totalmente los brazos para rodearla por el cuerpo.  Así da comienzo el coito.Ella busca montar sus muslos sobre los masculinos y, a la vez, sujeta los hombros de su hombre, pero echando la cabeza hacia atrás, ya que cuenta con mejor apoyo.La "rueda del kama" tiene la imagen de una mesa: los elementos físicos componen la pareja, en la que ésta va a cocinar, servir y degustar el mejor banquete.Cuando se realiza por primera vez, provoca enseguida el orgasmo, pero con la práctica se podrá disfrutar de esta posición a plenitud.Mirándose a la caraDe frente y con los ojos bien abiertos, para poder contemplar la excitación del otro.  Algo que se debe premiar con unos besos apasionados.


En el libro se detalla que antes de la penetración, es indispensable la excitación previa. Se nos advierte que la monotonía sexual arriesga a la pareja a evadir al marido en busca de otras aventuras o a la mujer por otras pasiones, de ahí obtiene importancia hacer del sexo un arte. La monotonía genera saciedad, y ésta la desolación del coito.

Obviamente también tenemos una parte de posturas sexuales; mucho menos acrobáticas que en el Kamasutra, pero con la peculiaridad que las posturas son más satisfactorias en la práctica. Por supuesto, no podemos olvidar que no se trata de un libro de literatura, sino en un antiguo manual sexual, por lo que la mayor parte del texto serán largas clasificaciones sin vigencia actual, pero en sí el libro es muy disfrutable.









Ananga Ranga
Kalyana Malla
Editorial: JORGE A MESTAS
España, 2002
ISBN: 8495994437
pág: 140

sábado, 27 de agosto de 2011

El Decamerón de Giovanni Boccacio

En plena Edad Media hubo una compleja obra literaria que introdujo la literatura erótica en el lector que no había leido nada igual en los últimos mil años. Aunque hubo algunos ensayos eróticos medievales anteriores, ninguno fue de amplia difusión ni inspiración a otros.

Escrito en 1351, "el Decamerón" está ambientado durante la epidemia de peste negra que azotó Florencia en 1348. La historia habla de siete mujeres y tres hombres jóvenes que se refugian en una villa en las afueras de Florencia. Para pasar el tiempo, cuentan historias que giran alrededor de el amor, la astucia y la fortuna.

El estilo es de historias es de Mise en Abyme o relatos dentro de otros, estilo que aparentemente copia de Las mil y una noches. No es aventurado decir que Boccacio conoció los clásicos persas.

Cada uno de los diez personajes sugerirá un tema para un día, y cada quien contará una historia, así hasta juntar las cien historias en diez días (decamerón = diez días)

Los temas, curiosidad en el medioevo, rara vez son religiosos, rara vez tratan de reyes, están ambientados en la mentalidad clasemediera y el hombre normal. Parece ser que el libro está dirigido al público femenino, o al menos así se deduce de las varias menciones.

Lo interesante para nosotros, es que gran parte de los cuentos (dos terceras partes) hablan del amor erótico desde el punto de vista del placer sexual. asi, aunque constreñido por el pecado y la moral, el punto de visrta del placer sexual es uno muy positivo para lo que uno esperaría de una novela de esa antigüedad.


-Rústico, ¿qué es esa cosa que te veo que así se te sale hacia afuera y yo no la tengo?
-Oh, hija mía -dijo Rústico-, es el diablo de que te he hablado; ya ves, me causa grandísima molestia, tanto que apenas puedo soportarlo.
Entonces dijo la joven:
-Oh, alabado sea Dios, que veo que estoy mejor que tú, que no tengo yo ese diablo.
Dijo Rústico:
-Dices bien, pero tienes otra cosa que yo no tengo, y la tienes en lugar de esto.
Dijo Alibech:
-¿El qué?
Rústico le dijo:
-Tienes el infierno, y te digo que creo que Dios te haya mandado aquí para la salvación de mi alma, porque si ese diablo me va a dar este tormento, si tú quieres tener de mí tanta piedad y sufrir que lo meta en el infierno, me darás a mí grandísimo consuelo y darás a Dios gran placer y servicio, si para ello has venido a estos lugares, como dices.
La joven, de buena fe, repuso:
-Oh, padre mío, puesto que yo tengo el infierno, sea como queréis.
Dijo entonces Rústico:
-Hija mía, bendita seas. Vamos y metámoslo, que luego me deje estar tranquilo.
Y dicho esto, llevada la joven encima de una de sus yacijas, le enseñó cómo debía ponerse para poder encarcelar a aquel maldito de Dios. La joven, que nunca había puesto en el infierno a ningún diablo, la primera vez sintió un poco de dolor, por lo que dijo a Rústico:
-Por cierto, padre mío, mala cosa debe ser este diablo, y verdaderamente enemigo de Dios, que aun en el infierno, y no en otra parte, duele cuando se mete dentro.
Dijo Rústico:
-Hija, no sucederá siempre así.
Y para hacer que aquello no sucediese, seis veces antes de que se moviesen de la yacija lo metieron allí, tanto que por aquella vez le arrancaron tan bien la soberbia de la cabeza que de buena gana se quedó tranquilo. Pero volviéndole luego muchas veces en el tiempo que siguió, y disponiéndose la joven siempre obediente a quitársela, sucedió que el juego comenzó a gustarle.


Las historias de basan en fuentes antiguas, facecias y leyendas europeas, pero la concepción profana del hombre y el tratamiento del cuerpo como algo alegre y positivo nos llevan a ver que la literatura en Florencia se adelantó cien años al renacimiento.

Los personajes de Boccaccio son seres comunes, defectuosos y desprovistos de cualquier valor noble, caballeresco o cortés, propio de una sociedad feudal. Destacan los ladrones, embusteros y adúlteros, y se enaltece su astucia, que les permite salir airosos de las situaciones descritas, a diferencia de la antigua concepción medieval, donde el protagonista o héroe de la historia poseía facultades inherentes a su ser, como la belleza o la fuerza, y asociadas siempre a la nobleza y la divinidad. Finalmente hay un leve  sentido anticlerical en las historias


Tenemos maridos cornudos, tenemos mocetones violados por un convento de monjas, tenemos embusteros que se hacen pasar por otras personas para meterse en cama con cónyuges ajenos, inocentes muchachitas a las que le sacan el diablo por ciertos métodos poco ortodoxos, autocornudos y algún sodomita.

La idea medieval de la mujer como fuente inagotable de libido, proclive a caer en las tentaciones de la carne es algo bastante de moda aún.

Otro punto interesante es la audiencia hacia la cual va dirigida: no está escrita en latín sino en florentino. El autor hace explícito su deseo de que sean las damas quienes lean el libro.

Antes de la invención de la imprenta, el Decamerón ya estaba traducido al latín, al catalán y al francés. Hay un par de traducciones al castellano fragmentarias o incompletas. También es un libro que desde un inicio ha sido profusamente ilustrado.

A pesar de la bien cuidada prosa, el estilo es muy simple, los personajes son creíbles y las moralejas se dejan de lado para resaltar el lado irónico o cómico. La obra maestra de Boccaccio fue inspiración para obras como El Heptamerón de Margarita de Navarra, las Cent Nouvelles Nouvelles, Los cuentos droláticos de Honoré de Balzac e incluso Los cuentos de Canterbury de Geoffrey Chaucer.

En Españas, después de que Voldemort muere, las ediciones del Decamerón se reproducen en castellano, muchas veces con poca calidad. Este es un libro muy fácil de conseguir en las librerías de viejo.




Perversógrafo: Sexo vaginal, adulterio, voyeurismo, sodomía, masturbación, violación anticlericalismo.





El Decamerón
Giovanni Boccaccio
Grupo Editorial Tomo
2006, México
EAN: 9789707753723
ISBN: 9789707753723
622 págs.

martes, 23 de agosto de 2011

La sonrisa vertical, "los libritos de portada rosa"

Hace mucho lei un relato llamado "El Hombre Que Fue a la Luna... Dos Veces" (Howard Rodman, 1967) sobre un niño en una granja que decía haber ido a la luna en un globo, ante la incredulidad del pueblo a quienes se les hacía maravillosa tal proeza, y dudaban de cómo sería aquello. 80 años después el anciano dice haber ido nuevamente a la luna, ante la risa de todos "Ya nadie va a la luna, no hay nada que ver allí".

Bueno, en la España de 1975 muere Francisco Franco después de treintaitantos años en el poder. Para aquel entonces, los organismos censores ya no funcionan eficientemente, por lo que se comenzaba a gestar una nueva etapa en la historia de España. Con la muerte del generalísimo, la etapa liberal que ya comenzaba a gestarse de hecho, se hace patente en la ley. Así entre 1975 y 1980 llega "la transición" a España. Y ya.....dejamos a Franco (En adelante llamado Voldemort o "el que no debe ser nombrado") de lado antes de que las hordas de pendejos entren a incendiar mi blog por nombrar a "quien tú sabes".

En 1977, el director de cine Luis G Berlanga, en conjunto con Beatriz de Moura, editora de Tusquets, se unen en uno de los mejores proyectos eróticos de la modernidad: fundan la colección "La sonrisa vertical". En ese entonces ya existían las colecciones de erótica de las editoriales, pero el erotismo en la literatura era tan nueva para la gente que éstos proyectos tardarían en tomar la dimensión que tuvieron con el tiempo. La mayoría de las colecciones eróticas de aquellos días ya no sobreviven en nuestros días.

Expresión chilena para describir lo femenino, originada en el habla popular en la Francia del siglo XVIII. "La sonrisa vertical" hace alusión a la vulva de la mujer, que asemeja una sonrisa invertida.

"Queremos dar aire qué respirar, porque el deseo es salud, y sobre todo queremos recuperar el culto a la erección, al hedonismo, a las fértiles cosechas que una buena y gozosa literatura puede ofrecernos. Y, a través de nuestros libros, a través de nuestra y vuestra sonrisa vertical, constatar que el escribir sobre lo biológicamente apetecible es algo inmanente a todos los tiempos, a todas las geografías, a todos los hombres".
Luis García Berlanga

En el año de 1979, depués de varios números de la colección, se les ocurre celebrar un certamen anual llamado "Premio la Sonrisa Vertical" que tenía como bases que los manuscritos fueran:

1.- Obras libres inéditas de 100 a 200 hojas, en cualquier idioma del Estado español (Así decía la convocatoria...hordas de pendejos: absténganse de incendiar).
2.- Que fueran eróticas
4.- Bajo seudónimo, pero el autor se comprometiera a revelar su identidad (mamones)
6 y 8 .- El premio era una estatuilla pedorra y una lana (el verdadero premio era salir editado).

Fueron miembros del jurado: Juan Marsé, Ricardo Muñoz Suay, Jaime Gil de Biedma, Beatriz de Moura, Juan García Hortelano, Camilo José Cela, Fernando Fernán-Gómez, Jorge Edwards, Charo López,  Almudena Grandes, Terenci Moix y Rafael Conte.

En un principio, la idea era que todo ciudadano español sacara de sus gavetas los libros eróticos que se habían escrito durante la represión Voldemort-ista....pero dichos libros no existían; es más, aparentemente tras 40 años de higiene sexual, los escritores no tenían NPI de lo que era la literatura erótica; los primeros años del premio se batalló un poco ante el escaso número se trabajos de calidad aceptable o apenas eróticos, pero poco a poco comenzó a normalizarse esa situación.

En los años 1983, 1994 y 2002 el premio fue declarado desierto, y finalmente en 2004, después de ser declarado desierto, se decidió "suspender temporalmente" el premio. ¿Qué había sucedido?

"La  expresión literaria del erotismo ha ido gradualmente asimilándose a  la narrativa general y se ha integrado, de un modo natural, en  colecciones literarias no acotadas específicamente al género erótico.
La mayoría de las obras premiadas en 'La Sonrisa Vertical' han  recibido, salvo en contadas ocasiones, escasa atención por parte de  la crítica, atención que actualmente ésta les dedicaría de haber sido  publicadas en colecciones no especializadas".

Es decir, como en el cuento del niño que fue a la luna; en un principio el problema del premio fué que la novedad era tal que nadie sabía de qué se trataba; mientras que al final el problema fue que el concepto del erotismo en la narrativa estaba integrado a toda la literatura y el premio ni llamaba la atención ni era importante ya.


A pesar de que el premio haya sido suspendido, la colección se mantiene vigente; a la fecha cuenta con más de 140 libros, algunos de ellos imposibles de conseguir ya (hasta la nueva impresión, si la hay). Las portadas rosas siguen llamando la atención, siguen vendiéndose y siguen editándose nuevos títulos y reimpresiones.


1 La insólita y gloriosa hazaña del cipote de Archidona de Camilo José Cela
2 Memorias de una cantante alemana de Wilhelmine Schröeder-Devrient
3 La imagen de Jean de Berg
4 Gamiani de Alfred de Musset
5 Grushenka de VV. AA.
6 A los pies de Omphalos de Henry Raynal
7 Las tres hijas de su madre de Pierre Louys
8 Mi vida secreta I de Anónimo
9 Mi vida secreta II de Anónimo
10 Historia del ojo de Georges Bataille
11 Diálogos de cortesanas y Manual de Urbanidad para jovencitas de Pierre Louys
12 El inglés discreto en un castillo cerrado de André Pieyre de Mandiargues
13 La educación sentimental de la señorita Sonia de Susana Constante Lamy (Premio 1979)
14 Diario de burdel de Josep Lluis Segui (Finalista 1978)
15 Señorita tacones altos de Anónimo
16 Irene de Albert de Routsie
17 Venus en India de Charles Devereaux
18 La pequeña María de Sylvain Saulnier
19 Mi madre de Georges Bataille
20 Los amores prohibidos de Leopoldo Azancot
21 Diez manzanitas tiene el manzano de Ofelia Dracs (Premio 1980)
22 Mater Amantissima de José Jara (Finalista 1979)
23 Cruel Zelanda de Anónimo
24 Amor burgués de Vicente Muñoz Puelles (Finalista 1982)
25 Madame Edwarda y El muerto de Georges Bataille
26 Anacaona de Vicente Muñoz Puelles (Premio 1981)
27 Mi vida y mis amores I de Frank Harris
28 Bestia rosa de Francisco Umbral
29 Fritzcollage de Pedro Sampere (Premio 1982)
30 Nueve semanas y media de Elizabeth McNeil
31 Amor y Tarot de Esteban López
32 Ella o el sueño de nadie de Mauricio Wacquez
33 Beacul de S.G. Seud Clozen
34 El hombre sentado en el pasillo de Marguerite Duras
35 Historia de O de Pauline Réage
36 Duende nocturno de Arnaud Delacomte
37 Tres días, tres noches de Pablo Casado Martín (Premio 1984)
38 Opus Pistorum de Henry Miller
39 Cuentos inenarrables de Aldo Coca
40 El mal de muerte de Marguerite Duras
41 El último goliardo de Antonio Gómez Rufo
42 Emmanuelle de Emmanuell Arsan
43 Las cartas de Saguia-El-Hamra de Vicent García Cervera (Premio 1985)
44 El azul del cielo de Georges Bataille
45 El matarife de Rafael Arjona
46 Sor Monika de Ernst Theodor Amadeus Hoffmann
47 Ligeros libertinajes sabáticos de Mercedes Abad (Premio 1986)
48 La nina russa de Anna Arumí i Bracons (Finalista 1986)
49 El Pecador Impecable de Manuel Hidalgo
50 Diario de un gran amador de Alberto Lattuada
51 Retorno a Roissy de Pauline Réage
52 Ceremonia de mujeres de Jeanne de Berg
53 El bajel de las vaginas voraginosas de Josep Bras (Premio 1987)
54 Siete contra Georgia de Eduardo Mendicutti (Finalista 1987)
55 El hábito del amor de Anne Cumming
56 Memorias de Dolly Morton de Anónimo
57 La esposa del Dr. Thorne de Denzil Romero (Premio 1988)
58 Elogio de la madrastra de Mario Vargas Llosa
59 La filosofía en el tocador de Marqués de Sade
60 El coño de Irene; El instante y Las aventuras de Don Juan Lapolla Tiesa de Louis Aragón
61 Las edades de Lulú de Almudena Grandes (Premio 1989)
62 Las amistades peligrosas de Pierre Choderlos de Laclos
63 Amatista de Alicia Steimberg (Finalista 1979)
64 La novela de la lujuria de Anónimo
65 Mademoiselle de Mustelle y sus amigas de Pierre Mac Orlan
66 Pubis de vello rojo de José Luis Muñoz (Premio 1990)
67 La caza del zorro de José María Álvarez
68 Las comedias eróticas de Marco Vassi
69 El vizconde Pajillero de los Cojones Blandos de Benjamin Péret
70 Memorias de un librero pornógrafo de Armand Coppens
71 Alevosías de Ana Rossetti (Premio 1991)
72 La última noche que pasé contigo de Mayra Montero (Finalista 1991)
73 Historia de R de Gaia Servadio
74 Josefine Mutzenbacher: Historia de una prostituta vienesa de Felix Salten
75 Las 120 jornadas de Sodoma de Marqués de Sade
76 Confesión sexual de anónimo ruso de Anónimo
77 La alfombrilla de los goces y los rezos de Li Yu
78 La esclava instruida de José María Álvarez (Premio 1992)
79 Yo necesito amor de Klaus Kinski
80 En busca del amor de Anne Cumming
81 Entre todas las mujeres de Isabel Franc
82 Tribulaciones eróticas e iniciación carnal de Salomón, el Magnífico de Leopoldo Azancot
83 Memorias de una princesa rusa de Anónimo
84 El hombre de sus sueños de Dante Bertini (Premio 1993)
85 La amante fea de Josep Lluis Segui (Finalista 1993)
86 La venus de las pieles de Leopold von Sacher-Masoch
87 Las noches salvajes de Cyril Collard
88 Justine o los infortunios de la virtud de Marqués de Sade
89 Preludio carnal de Robert Sermaise
90 Salvajes mimosas de Dante Bertini
91 Tu nombre escrito en el agua de Irene González Frei (Premio 1995)
92 Me gustan sus cuernos de Antonio Elio Brailovsky (Finalista 1995)
93 El Eros de Alberto Bevilacqua
94 El necrófilo de Gabrielle Wittkop
95 La solución salina de Marco Vassi
96 Silencio de Blanca de José Carlos Somoza (Premio 1996)
97 Cuerpos entretejidos de Antonio Altarriba (Finalista 1996)
98 Querido Shera-Zaide de El Djanina
99 El ama: memorias de una dominadora de Annick Foucault
100 La curvatura del empeine de Vicente Muñoz Puelles
101 Desnudarse es lo que ella no quería de Adolf Muschg
102 Roberte, esta noche de Pierre Klossowski
103 La cinta de Escher de Abel Pohutanik (Premio 1997)
104 Hot line: historia de una obsesión de Francesca Mazzucato
105 Bella de Candor y otros relatos chinos de Anónimo
106 Kurt de Kurt K. (Premio 1998)
107 El regalo de Luzbel de Ramón Burcet (Finalista 1998)
108 La revocación del Edicto de Nantes de Pierre Klossowski
109 El mal mundo de Luis Antonio de Villena (Premio 1999)
110 Autobiografía de una pulga de Anónimo
111 Cuentos eróticos de Navidad de VV. AA.
112 Púrpura profundo de Mayra Montero (Premio 2000)
113 La casa de los budas dichosos de Joao Ubaldo Ribeyro
114 Relaciones escandalosamente puras de Francesca Mazzucato
115 Los perros y Las aventuras singulares de Hervé Guibert
116 Espera ponte así de Andreu Martín (Premio 2001)
117 Fanny Hill de John Cleland
118 La atadura de Vanessa Duries
119 Cuentos eróticos de verano de Juan Abreu
120 ¿Qué es Teresa? Es... los castaños en flor de José Pierre
121 Llámalo deseo de José Luis Rodríguez del Corral (Premio 2003)
122 Satisfaction de Alina Reyes
123 Eso no de Marcelo Birmajer
124 Amada de los dioses de Javier Negrete
125 Mujer desnuda, mujer negra de Calixthe Beyala
126 La séptima noche de Alina Reyes
127 El impudor de la mirada de Octavio Lothar
128 Diosa de Juan Abreu
129 Mi vida secreta de Anónimo
130 Diario poco decente de una jovencita de Jacques Cellard
131 Tiresias de Marcel Jouhandeau
132 Cuentos eróticos de San Valentín de Albert Andreu i Alonso
133 El cuaderno de Rosa de Alina Reyes
134 La rendición de Toni Bentley
135 Dos iguales de Cintia Moscovich
136 El hombre que me baña de Valentina Maran
137 Juliette o las prosperidades del vicio de Marqués de Sade
138 Erotomanía. Una historia de amor de Francis Levy
139 Elogio de la azotaina de Jacques Serguine
140 Maravilla en el país de las Alicias de Antonio Altarriba
141 Camiones de ternura de Françoise Rey
142 Feliz cumpleaños… erótico de AA. VV.
143 El año del calipso de Abilio Estévez
144 Nochebuena en tu cuerpo de AA. VV.
145 Brama, de David Miklos

La literatura erótica ha sido considerada tradicionalmente un género menor dentro de la narrativa; sin embargo colecciones como éstas le dan al género su justo valor y reconocimiento; hay en la colección obras que no desmerecen ante los clásicos de todos los tiempos; tenemos algunos premios nobel de literatura  y grandes autores de clásicos.

La Sonrisa vertical recoge obras demonizadas en su época, escritas por autores malditos. También hay anónimos, autores contemporáneos y clásicos del siglo XX.

Es más, me atrevo a decir que se ha hecho costumbre que los libros eróticos tengan tapas en color rosa, aun que no pertenezcan a la colección ¿Coincidencia? De ningún modo.

sábado, 20 de agosto de 2011

Poesia Erótica y Picaresca, Antología de los siglos XVI al XIX

Ya antes he hablado de los excelentes cancioneros antiguos, en especial del Cancionero de Amor y Risa de Joaquín López Barbadillo y del Cancionero Moderno de Obras alegres de Spirrtual.

Hay una editorial que recientemente ha lanzado versiones recuperadas de obras clásicas, desde antiquísimos cuentos (que hoy son infantiles) hasta antologías de todo tipo. la editorial LARSEN tiene como objetivo el mostrar a la mayor cantidad de lectores, tesoros literarios a los que sólo tienen acceso los estudiosos.

Desde el siglo XV y antes, hay cancioneros con poesía picaresca. En el siglo de oro español ésta picaresca cundió y se contagió en autores como Samaniego e Iriarte, y son las obras que más fácilmente nos llegan. Sin embargo hay una gran cantidad de poemas, coplas, quintillas, redondillas, etc que permanecen anónimas, a pesar de haber sido atribuidas a Góngora, a Quevedo, a Espronceda, etc.





DESENGAÑO DE LAS MUJERES 
Francisco de Quevedo
Puto es el hombre que de putas fía,  
y puto el que sus gustos apetece;
puto es el estipendio que se ofrece
en pago de su puta compañía. 


Puto es el gusto, y puta la alegría
que el rato putaril nos encarece;
y yo diré que es puto a quien parece
que no sois puta vos, señora mía.


Mas llámenme a mí puto enamorado,
si al cabo para puta no os dejare;
y como puto muera yo quemado 


si de otras tales putas me pagare,
porque las putas graves son costosas,
y las putillas viles, afrentosas.




COPLAS
Tomás de Iriarte
Eres negra como un cuervo
Y aún mas fea que el hambre, 
pero tienes junto al culo
un gusto de azúcar cande.


Tú me tendiste en el suelo
como si fuese una perra,
Y con esos cojonazos
me lo llenaste de tierra.






TÚ, RÁBANO PIADOSO
Anónimo
Tú, rabano piadoso, en este día 
visopija serás en mi trabajo;
serás lugarteniente de un carajo,
mi marido serás, legumbre mía.
  
Un poquito más largo convenía, 
mas no importa, que irás por el atajo.
Entra de punta y sácame de cuajo 
las gotas que el que pudre me pedía. 


Ya entraste, mas las hojas quedan fuera. 
Pues ¿qué han hecho las hojas a mi papo, 
que no han de entrar, si es él el que lo pierde? 

Las hojas entren, y ojalá viniera
el ramal de fray Lucas, de solapo, 
y diérase mi coño un gentil verde. 

Más adelante en el siglo XIX también tenemos un rico resurgimiento del verso pícaro, más atrás en el siglo XI y XII tenemos algunos anónimos de gran belleza.

Ahora, la picaresca es un género fácilmente accesible al público, pero lo que hace verdaderamente excepcional a este libro es la parte de los poemas eróticos. Al estar gran parte de ellos reunidos en una parte específica del libro, crea un clima cachondón muy disfrutable.

Muy buen libro....de colección; no se lo pueden perder.



Perversógrafo: Sexo vaginal, beso negro, anticlericalismo, infidelidad, masturbación, homosexualidad.



Poesia Erótica y Picaresca
Antología de los siglos XVI al XIX
Editorial Proyecto Larsen
Argentina, 2010
ISBN 9789871458196
154 pags.



martes, 16 de agosto de 2011

Patrañas (Nabo & Higo) de Self Will

Extraño, cómico, aterrador y emocionante.

Este libro contiene dos historias mutuamente complementarias, el ying y el yang de una novela. No, no una novela; dos historias inconexas que a ojos vistos son patrañas: Una mujer insatisfecha sexualmente a la que le crece un pene y un hombre insatisfecho laboralmente a quien le crece una vagina.

El libro trata sobre la sexualidad, la asexualidad, la "insexualidad", la intersexualidad y la manera en que hombres y mujeres conciben el sexo. Más allá, la manera cómo el lector concibe los sexos.

En "Nabo", tenemos una serie de personajes deprimentes: un hombre mínimo, eyaculador precoz y ebrio consuetudinario, casado con una mujer abnegada y, en mi opinión, mínima también. Ella ha tenido ocasión de probar el lesbianismo con sus amigas, encontrando satisfacción sexual mas no la vida tranquila que ella espera. Con Dan, su marido, sólo tuvo una efímera satisfacción sexual en un encuentro casual, lo que la llevó a casarse con él.

Dan es ingenioso y buena persona, pero alcohólico perdido; ella tiene un poder de indiferencia infinito. Va guardando sus frustraciones, enterrándolas. Un día Carol decide comenzar a masturbarse. Casi para terminar sus frotamientos, descubre una pequeña excrecencia cartilaginosa; un "eso" que comienza a hacerla cambiar, se obsesiona por la masturbación mientras Dan ingresa a un grupo de AA.

En el grupo de AA, hay un tal Dave que se quiere pasar de listo; tiene con sus pupilos una labor del tipo "vampirismo voyeurista", donde le gusta inmiscuirse en las relaciones de las personas a las que ayuda por una satisfacción morbosa no sexual.

Carol comienza a ver cómo crece su "eso" hasta convertirse en un pene. Por pudor, jamás va a ver a un médico para que la examine. Más que un cambio físico, Carol comienza a cambiar por dentro, todas las frustraciones que acumulaba como indiferencia, comienzan a aflorar como......algo; como un deseo insatisfecho.

Hasta que explota; explota de una manera aterradora con una venganza bien planeada y horriblemente llevada a cabo.
... Dan sintió cómo los dedos afilados le metían por el ojete una gota de materia fría y viscosamente pegajosa. Carol lo cubrió, apoyando por un instante el pecho en su espalda, y luego se enderezó, miró la espina dorsal encorvada de Dan y, muy tiernamente, guió su pene al blanco.
Carol sintió toda la potencia de su pene, su construcción columnar, su rigidez vascular. Percibió el rechazo contraído del esfínter de Dan, pero embistió pese a eso y debido a eso. Supo que éste era su momento, su confirmación de lo que realmente era... Burdo, ¿verdad? La noción de ser capaz de follarse a Dan, de penetrarlo realmente, de alguna manera volvió agresiva a Carol, la convirtió en una violadora... Burdo, pero cierto.
La historia tiene la forma de una narración hecha por un extraño personaje a un pasajero del tren nocturno. El final es una muestra de la diferencia en nuestra concepción de la agresión sexual entre hombres y mujeres.

En "Higo" tenemos personajes mucho más simpáticos: John Bull, un frustrado escritor de la columna de espectáculos de un semanario y jugador de rugby, descubre un día que le está creciendo una vulva en la corva de una pierna. Bull decide visitar a su médico de cabecera, Alan, un doctor felizmente casado, con una hermosa mujer y una linda bebé; un doctor de imagen intachable y quien todos creen que es un santo.

Alan guarda oscuros secretos; él sabe que no puede ser fiel a su mujer, quien en secreto le causa repugnancia. Alan ha tenido aventuras y relaciones duraderas, siempre por sexo y nunca por veradero enamoramiento. Alan es un hombre que huye de los compromisos.

La historia es simple, Alan se enamora de la vagina de John y decide aprovecharse y desvirgarlo, éste se acepta parte mujer y se enamora del doctor. El doctor, al darse cuenta del compromiso que se hace entre ambos, lo traiciona.

Es una historia muy divertida, con personajes simpáticos y bien logrados.
Cuando por fin lo penetró, Alan tenía la cara enterrada entre los mullidos omóplatos de Bull. La pierna de éste estaba doblada por la rodilla, cómodamente colocada hacia arriba y bajo la entrepierna de Alan. Aunque el médico estaba torpemente tendido en el piso, su mano izquierda tenía libertad de acción. Libertad para acariciar el pene sorprendentemente delgado de Bull; su vientre macizo, sus tetillas como picaduras de mosquitos.
Alan estaba arrobado. Para él, Bull era pura mujer. Primero su histeria y ahora aquella trémula rendición. ¿Podía existir algo más femenino? Para él, eran como dos supervivientes de un accidente aéreo copulando en medio de los restos que se quemaban, afirmando delirantemente el hecho mismo de estar vivos. ¡Y con cuánta belleza su pierna se frotaba contra él, suavizando cada una de sus propias embestidas!
Lo que el autor pretende es mostrarnos las diferencias en la concepción de lo que significa la propia sexualidad entre hombres y mujeres, amén de los prejuicios sociales de ciertas prácticas sociales:

Al final de la primera historia, un personaje masculino actúa como una típica mujer occidental actuaría en una situación de violencia sexual........un choque para el lector que espera ver otra reacción por el simple hecho de ser un hombre quien habla.

Al final de la segunda historia un personaje masculino actúa como una típica mujer occidental actuaría en una situación de engaño y abandono.....un choque para el lector que esperaría que al menos le metiera unos chingadazos entre ceja, oreja y madre al doctor.

Lo que el escritor pretende es que pienses......"Me indigna mucho porqué el personaje no reaccionó violentamente si es un hombre, no una mujer". Y luego te espantas por tu propia construcción social.

Por eso el libro se llama "Patrañas", lo importante no es la historia sino tu reacción a ella. El libro es entretenido, un libro para pensar.


Perversógrafo: Sexo vaginal, oral, anal, juguetes, lesbianismo, infidelidad, masturbación, violación, asesinato, prostitución, homosexualidad, ¿homosexualidad?....sexo extraño.



Patrañas (Nabo & Higo)
Will Self
Editorial Anagrama
1995
ISBN: 978-84-339-0692-2
pág: 224

sábado, 13 de agosto de 2011

Memorias de Cora Pearl

Cora Pearl fue una famosa cortesana en la Francia del siglo antepasado, aunque no tenía una belleza excepcional, el ser pelirroja y el tener unos senos perfectos eran "la mejor carrocería" de una mente que sabía lo que quería.

Cora Pearl nació como Emma Elizabeth Crouch probablemente en Londres, probablemente en 1835. "Probablemente" porque se sospecha que falseó su certificado de nacimiento previo pago de cochupo, para aparentar que nació en 1842 en Plymouth Inglaterra. Después de ser una de las cortesanas mejor pagadas de París y de haber derrochado sumas absurdas en actos para impresionar a sus amantes, clientes y amigos, llegó a sus 50 años en relativa pobreza, sin un hombre que mantuviera su elevado ritmo de gastos y agobiada por las deudas de juego.

Es entonces cuando decide publicar un libro con sus memorias; lo hace como siempre, con una estratagema muy ingeniosa en mente: "ganar algunos billetes y tratar de vivir algún tiempo". En realidad, si eras uno de sus amantes, se supone que por una módica cantidad podías cambiar un poco la autobiografía aquí y allá, para hacerte parecer buena persona, generoso o simplemente desaparecer del texto. Entonces, si el libro no es tan picante como pudo haber sido dada la experiencia de la señora y el tamaño de sus amantes, es porque su estrategia fue exitosa.

El libro se publicó en 1886. Desafortunadamente no tuvo un gran éxito debido a que el estilo franco y directo de la autora no estaba de moda, además de que los lectores esperaban mejores chismes de las celebridades de la época. Sólo hubo una edición en francés y una traducción la inglés, para luego desaparecer de los anaqueles por cien años.

Unos meses después de la publicación del libro, Cora Pearl murió, víctima de un cáncer intestinal. En sus últimos meses algunos de sus amantes y admiradores más generosos le pasaban una modesta pensión y pagaron su funeral.

En su libro, nos explica que tras ser abandonada por un padre irresponsable es enviada a Francia para que esté bajo mejores cuidados con una tía y luego en un internado.  En el internado nos narra la típica iniciación al lesbianismo por sus compañeras más avanzadas.

También allí le es explicado el mecanismo fisiológico de los hombre y es iniciada en un juego en el que entre tres chicas seducen y se parchan al pobre jardinero del convento.

Un día un individuo la invita a salir, la narcotiza y la viola; supuestamente al confundirla con una prostituta, ella queda marcada por éste hecho y parece desconfiar de los hombres desde entonces. Comienza a tomar amor por el dinero y el asunto del "metesaca", se confiesa calentorra y termina por ser mantenida de un anciano con el que sale de vacaciones y tiene sesiones de sexo violento.

Se hace cortesana en un burdel en donde le hacen una "prueba de sillón" como en el porno y la instruyen  con un asesor profesional en el arte del buen sexo. En ese lugar le enseñan cómo fingir el orgasmo sin tenerlo,  cómo excitar de diversas maneras a un hombre con el miembro fláccido, qué vino va mejor para excitar y cuál para adormecer al hombre, el modo de utilizar los perfumes para estimular el acto y otros trucos para aminorarlo. Aprende que la lujuria para una prostituta es un lujo improductivo.

Independizada después de un tiempo, comienza a recibir regalos de sus numerosos amantes; habla de algunos de sus hombres, la mayor parte de las veces en un tono amable y positivo, dejando las partes sexosas y escandalosas como historias que les suceden a otras personas.

Al rozar con los labios el pomo de su ariete y acariciarle con el dedo la zona entre las bolas y el trasero, sentí cómo todo su cuerpo se convulsionaba, y antes de que hubiera pasado mis labios tres o cuatro veces por el vástago, me rechazó bruscamente -cortesía propia de su natural tierno y considerado y de su inexperiencia- en el momento de la convulsión suprema y vi cómo la evidencia irrefutable de su pasión brotaba con la celeridad y fuerza de un disparo.


Aunque los chismes de sus amantes son interesantes, lo mejor del libro son las descripciones de sus exagerados gastos, gastos que ella dice que fueron inversiones para atraer amantes ricos; así, narra la vez que se bañó frente a sus amantes en una tina llena de champagne, o la vez que ella misma se sirvió desnuda como postre en una cena de caballeros conocidos.

Nos narra cómo montaba desnuda frente a un amante que le regaló una yegua, y nos presume que además de los regalos, su tarifa por noche solía ser de doce mil francos.

Cuando una está bajo la protección de un hombre de nobleza y de fortuna, imitar su estilo de vida y hacer uso ostentoso de su dinero. La esposa de un hombre puede permitirse vestir desaliñada y anticuada; la querida, nunca, porque su aspecto es índice de la riqueza y categoría de su protector.
Coger en plena cabalgata, entregarse a un pobre estudiante por caridad, amantes que resultan homosexuales, malquerencia de las cortesanas competidoras, chismes y orgías en castillos acondicionados como edénicos sitios de recreo al aire libre.

Un Conde le pide a su perrito para preñar a su perrita, pronto se hacen dos parejas:
El conde me preguntó si tenía que pagar algo, y yo, viendo en él un caballero moreno, ágil y atractivo, le contesté que el único pago que aceptaba del amo era el mismo que Loulou estaba abonando. Él, sin perder la compostura, por la sorpresa, me invitó a que le condujera a la alcoba, donde no tardó en mostrar un entusiasmo equiparable al de mi can, aunque celebro decir que bastante más fino. Aunque, para mi sorpresa, quizá inspirado por la exhibición de Loulou, se mostró partidario de la modalidad canina a tal punto que desdeñó las demás y, como a mí la postura a cuatro patas, por estimulante que sea, me cansa al cabo de unas horas, no tuvimos una relación duradera. Sin embargo, en nuestro segundo encuentro, mientras su vientre achuchaba mis nalgas y sus bolas batían mis muslos, me colgó al cuello un magnífico collar de perlas, y en otra ocasión me obsequió con unos espléndidos pendientes de diamantes; deferencias que me hicieron soportar con resignación el hecho de que nunca tuve el placer de mirarle a los ojos cuando alcanzábamos el momento supremo, algo que siempre me causa una ardorosa satisfacción.
Poco después narra el hambre y el aburrimiento durante el sitio de París en la guerra franco-prusiana. Se supone que durante ese tiempo ella supo ganarse el cariño de la gente con acciones muy nobles como involucrarse para dar animo a los ejércitos, ayudar en un sanatorio y hacer donaciones valiosas.

Tras la guerra, viaja por Inglaterra y Suiza, y vuelve a un París destrozado en un momento en que ella misma había quedado sin fortuna y sin quien pagara sus grandes adeudos.

Bueno, Cora Pearl nos habla de príncipes, gobernantes, artistas (Doré, por ejemplo) y otras personas importantes, pero también nos habla de sus criados y la vida sexual de ellos. El libro es curioso sin llegar a ser una obra de arte. En 1982 se encuentra el libro en manos de un coleccionista alemán, y es impreso nuevamente, gozando de una relativa "segunda vida".

Cora Pearl carece de cualidades para amarla o admirarla; fue cínica, desordenada y bastante descarada, se supone que ni siquiera escribió el libro, la idea fue del editor y Cora sólo encargó a su sirvienta que lo hiciera ... pero el libro recoge algunas historias que valen la pena de leer.






Perversógrafo: Sexo vaginal, oral, en sitios públicos, narcotizada, exhibicionismo, voyuerismo, prostitución, infidelidad, promiscuidad, lesbianismo, violación, efebofilia, homosexualidad, 69, masturbación, masaje erótico, violencia, tríos, orgías.









Confidencias De Una Cortesana
Cora Pearl
Editorial: Planeta
1984
ISBN: 9788432037795


martes, 9 de agosto de 2011

El Kamasutra de Vatsiaiana

Tengo un tio que dice que existen 68 posiciones para tener sexo, porque a partir de la 69, "todo son puras mamadas". El se decía versado en los secretos del kamasutra, pero supongo que ese día las cervezas no estaban muy frias.

El kamasutra es por todos conocido y por pocos leído. He escuchado el absurdo de que es el libro más erótico de la historia, cuando se trata en realidad de un manual de buenas costumbres en la cama. La traducción literal del título vendría a ser: Aforismos sexuales (sexual en su acepción de placer).

La verdad es que se trata de un manual amoroso clásico de la literatura de la India, escrito en sánscrito por un tal (o para un tal) Vatsiaiana, entre el 240 y el 550 DC, se supone que fue escrito en el período Gupta.

El libro está dividido en 36 capítulos irregulares, con siete divisiones; los temas que trata son:
  • Introducción: Sobre el placer sexual, clasificación de hombres y mujeres, importancia del sexo.
  • Sobre el acto sexual: besos, preámbulo sexual, posiciones, sexo oral, prohibiciones, etc.
  • Sobre la elección de la esposa: Parece ser que tenía una importancia alta el elegir a la pareja ideal para formar un matrimonio exitoso.
  • Sobre la esposa: Reglas de conducta de una mujer casada (el único capítulo llanamente machista).
  • Sobre las esposas de los otros: seducción, "raboverdismo", "perfumación" y otros cuernos.
  • Sobre las cortesanas: Hasta en la prostitución hay etiquetas
  • Sobre atraer a otras personas: Perfumes, encantamientos, recetas, etc.
Para la mayor parte de las personas, el Kamasutra son una serie de dibujos o fotografías que muestran toda clase de acoples complicados con nombres sugerentes o cómicos. Hace poco escuché en un programa referirse al kamasutra como "ese libro de los dibujitos".

Para el autor, había 8 maneras básicas y 8 posiciones principales, lo que nos da 64 "artes" o combinaciones (parece que mi tio exageró, aunque no por mucho) y esta es la característica más conocida del libro (también exagerar es una característica de mi tío).

Otras partes curiosas del libro son la clasificación del arañazo, el golpe y la mordida en el combate sexual, el sexo oral con eunucos (o seres "del tercer sexo", también descrito; nunca con mujeres) y las prohibiciones de tener relaciones con mujeres en el baño.

El propósito del libro era mostrar la sabiduría sexual al hombre corriente como una manera de que viviera su sexualidad de una manera trascendente y no como algo frívolo. El sexo se ve como algo bueno y positivo para compartir con otra persona; mujer con hombre de preferencia, de la misma casta social aunque no sea tu pareja legal.

La obra llega a occidente a través de una traducción al inglés de Sir Richard Francis Burton que data de 1883, traducción que publicó mediante una estrategia que evadía las rígidas leyes de censura en la Inglaterra Victoriana, al presentarlo como un trabajo científico de un ente conocido como la "Kama Shastra Society". Se supone que la traducción de Burton tiene agregados externos al  manuscrito original, cosa común en las traducciones de Sir Richard.

En occidente, el libro fue una leyenda durante muchos años, hasta que se popularizó tras la revolución sexual de los años 60. Actualmente hay montones y montones de ediciones del libro, la mayor parte ilustrados con "dibujitos" o fotografías.......Yo sospecho que pocos lo leen.

Así, mas que una obra erótica tenemos un antiguo texto académico e higiénico. Nuestra traducción es la más plana y simple de una serie de textos de sabiduría tántrica de la India. Se trata de consejos hacia el ciudadano cosmopolita que vive en una ciudad "moderna"


Aunque la parte más famosa de la obra sea aquella de la descripción de las posturas, también enumera otros placeres, como los besos, las artes, la música, los abrazos, los gritos y gemidos.

El Kamasutra defiende la importancia del placer en todas sus formas, como si fuera una condición civilizatoria y algo positivo en el estilo de vida cosmopolita de la India de aquellos días

Dos de los capítulos están dedicados a la prostitución y a la seducción, aspectos importantes en la sociedad. Muestra mujeres que pueden ser seducidas con facilidad y da consejos higiénicos para la conquista

Al final tenemos un capítulo dedicado a los hechizos, pócimas y medicinas para ayudar en el arte del amor, desde afrodisiacos  hasta hechizos.
Mientras lo sostiene con la mano, lo acerque a los labios, lo apriete y mueve la boca: éste es el "modo moderado". Luego, cubra con la mano la parte superior y apriete de lado con los labios, sin utilizar los dientes; y tranquilice, diciendo "¡Basta así!", es el "mordisco lateral".
Cuando, tras una nueva invitación, aprieta contra los labios bien juntos la parte superior como atrayéndola a sí, y afloja la presión, se tiene la "presión externa". Si, llegado a este punto, bajo indicación, lo introduce un poco más, o sea aprieta la parte superior y luego suelta, es la "presión interna".
Cogerlo como un labio, mientras se le sujeta con la mano, es el "beso". Si, hecho esto, se le roza en todas partes y se le toca en la parte de arriba con la punta de la lengua, se tiene el "toque".
Si, llegado hasta aquí [desnudado], por la excitación se introduce la mitad y se presiona varias veces muy fuerte, soltando [cada vez], se consigue el "chupar el mango". Cuando, siguiendo el deseo del hombre, se lo mete y se lo presiona hasta la conclusión, es el "devorar". Se emitan sonidos y golpes a gusto. Éstos son los tipos de amor con la boca.


Curiosamente, el sexo anal es tratado como una variación regional que se aparta de la norma y que está proscrito por la religión, pero no por ello es condenado en el libro.



Perversógrafo: Sexo vaginal, oral, anal, orgías, homosexualidad, prostitución, infidelidad, tríos.




Kamasutra
Richard Francis Burton
Editorial: JOSE J. DE OLAÑETA, EDITOR
2009
ISBN: 9788497165907
pág: 248

sábado, 6 de agosto de 2011

La filosofía en el tocador del marqués de Sade

Basta de filosofía, vamos a la cochinada.

En 1795 se publica de forma anónima "La filosofía en el tocador o Los instructores inmorales", una extraña novela del marqués de Sade que salió a la luz cuando "Justine o los infortunios de la virtud" ya había sido un escándalo.

Una cosa graciosa, es que con la publicación, Sade quiso ocultar la autoría de la novela que nunca reconoció, para ello puso en el frontispicio:




LA FILOSOFÍA EN EL TOCADOR
Obra póstuma del autor de
JUSTINE

Parece ser que Sade intentó hacer creer que como él no había sido la pluma de Justine, su nueva novela no debería traerle problemas. Se equivocó por completo.

Los personajes principales de la historia son:

Dolmancé: Joven libertino con obsesión por el sexo anal activo y pasivo, su libertinaje es tan famoso que su fama lo precede.
Señora de Saint-Angé: Una mujer dada a los placeres, quien ha conseguido una muchacha virgen e inocente para corromper.
El Caballero: hermano "casi-heterosexual" de la señora de Saint-Ange, es amante de su hermana y tiene la función de ser quien desvirgue a la muchacha. Parece ser menos cruel y más "normal" que Dolmancé, aunque nunca se niega a los placeres aunque tenga comezones éticas.
Eugenia: Una muchacha de 15 años educada en la religión, muchacha que pronto se descubre libertina y afecta a los placeres. En mi opinión es una cabeza hueca sin criterio propio.

Los demás personajes no pueden llamarse tales pues son mas objetos que otra cosa; tenemos al jardinero, a un criado sifilítico y a los padres de Eugenia; la mamá que será víctima de la crueldad y el libertino padre, que explica algunas cosas en una carta, pero nunca aparece en la acción.

Dolmancé, hombre inmoral, corrupto, malvado y perverso es invitado por la cruel Madame Saint-Ange para que le ayude a pervertir a Eugenia, una muchacha adolescente virgen, criada con todo el recato que una educación religiosa exigía.

En un principio se supone que la dama ha encontrado a la chica durante un encierro que tuvo en un convento cuando su marido (el de ella, no el de ustedes) estaba de viaje, pero después nos damos cuenta que Eugenia ha sido enviada a la dama por su propio padre, un libertino que quiere que la corrompan para tener acceso sexual a su hija (a la de él, no a la de ustedes).

La señora cita a la quinceañera con la promesa de iniciarla en los placeres lesbianos, pero es sorprendida al encontrar a Dolmancé en el tocador de la señora; la chica se cree engañada, pero pronto es convencida de que está allí para ser aleccionada y pervertida en todas las artes. Se le presenta la oportunidad de des-aprender sus buenas costumbres.

No hay ninguna acción, por singular que podáis suponerla, que sea verdaderamente criminal; ninguna que pueda llamarse realmente virtuosa. Todo es en razón de nuestras costumbres y del clima que habitamos; lo que aquí es crimen, es con frecuencia virtud cien leguas más abajo, y las virtudes de otro hemisferio podrían, a la recíproca, ser crímenes para nosotros. No hay horror que no haya sido divinizado, ninguna virtud que no haya sido reprobada.
Después de disertar sobre la religión y la castidad, es convencida de que el libertinaje es lo correcto. Con sofismas le demuestran que una mujer no es la sangre de su hijo, siendo el semen la única semilla fértil, por lo tanto la madre es un ser despreciable que sólo buscó el placer sexual. Con esa pseudociencia comienzan a meterle a Eugenia la idea del matricidio en la cabeza.

En las pocas horas en las que transcurre la acción, Eugenia es pervertida e iniciada en toda clase de prácticas sexuales, en el hedonismo y en la filosofía sadeana. Ella se deja pervertir con gran gusto, siendo desvirgada analmente un par de veces antes de serlo por vía vaginal por El caballero,  ya que Dolmancé, como idénticos personajes de Las 120 jornadas de Sodoma, sólo podía obtener una erección como sodomita activo (y si había caca, mejor).

En las orgías, Sade muestra una obsesión muy extraña por las formas, los números y la trasgresión. Las orgías acumulan trasgresiones al exceso, así, es preferible una sodomización con la hermana casada, porque significaría una triple afrenta a las buenas costumbres.

Ejemplo de la organización de una orgía "sencichita":
DOLMANCÉ: Nada más sencillo: el objetivo principal, en mi opinión, es que yo me corra dando a esta encantadora muchachita el mayor placer que pueda. Voy a meterle mi polla en el culo mientras, doblada en vuestros brazos, la magreáis como mejor sepáis; en la postura en que os coloco, ella podrá devolvéroslo: os besaréis la una a la otra.Y tras algunas correrías en el culo de esta criatura, variaremos el cuadro. Yo os encularé, señora; Eugenia, encima de vos, con vuestra cabeza entre sus piernas, me dará a chupar su clítoris: de este modo le haré perder leche por segunda vez. Luego, yo me volveré a colocar en su ano; vos me ofreceréis vuestro culo en lugar del coño que ella me ofrecía, es decir, que pondréis, como ella acabará de hacerlo, su cabeza entre vuestras piernas; yo chuparé el ojete de vuestro culo de la misma forma que habré chupado el coño; vos decargaréis, yo haré otro tanto mientras mi mano, abrazando el lindo cuerpecito de esta encantadora novicia, irá a cosquillearle el clítoris para hacerla correrse también.

Dolmancé trata de derrumbar todas las barreras de las costumbres: la religión que es el principio de todo mal, la virtud, la familia, la iglesia, el sexo vaginal, etc. Es tan extremo que cae en su propia trampa de mencionar a Adán y a Noé en su arenga anticlerical:
Adán no fue, como Noé, sino un restaurador del género humano. Un horrible cataclismo dejó a Adán sólo sobre la tierra, igual que dejó a Noé un acontecimiento semejante; pero la tradición de Adán se perdió, y la de Noé se conservó.
Curioso es que mienras Dolmancé dice que el corazón nos miente y nos hace débiles, que debemos aprovechar las oportunidades y desoir la conciencia, El caballero lo refuta diciéndole a Eugenia que el corazón es  lo único que nos hace vivos y nos hace humanos, que una cosa es ser ateo y libertino y otra diferente es ser cruel y perverso.

Pero en lo que siempre están de acuerdo es en la voluptuosidad, a la que se entregan sin importar sus diferencias ideológicas; lo que demuestra que para los hedonistas las diferencias no existen.
DOLMANCÉ: ¡Voluptuosa criatura! ¡Cómo empujas mi leche, cómo me obligas a correrme con tus frases y con el extremado calor de tu culo!... Todo me fuerza a correrme ahora mismo... Eugenia, da ánimos al coraje de mi jodedor; oprime sus flancos, entreabre sus nalgas; ahora ya sabes el arte de reanimar los deseos vacilantes... Tu sola proximidad da energía a la polla que me jode... La siento, sus sacudidas son más vivas... ¡Bribona, tengo que cederte lo que hubiera querido deber sólo a mi culo!... Caballero... te vas, lo siento... ¡Espérame!... ¡Esperadnos!... ¡Oh, amigos míos, corrámonos juntos: es la única felicidad de la vida!...SRA. DE SAINT ANGE: ¡Ay! ¡Joder, joder! Correos cuando queráis... yo no aguanto más. ¡Rediós en quien me jodo!... ¡Sagrado bujarrón de dios! ¡Descargo!... Inundadme, amigos míos, inundad a vuestra puta..., lanzad las olas de vuestra leche espumosa hasta el fondo de mi alma abrasada: sólo existe para recibirlas. ¡Ay! ¡Ay! ¡Ay! ¡Joder... joder!... ¡Qué increíble exceso de voluptuosidad!... ¡Me muero!... ¡Eugenia, déjame que te bese, que te coma, que devore tu leche mientras pierdo la mía!...

La novela está escrita como  un diálogo teatral dividido en siete partes; en la quinta parte hacen una pausa en sus orgías para leer una larga arenga político-filosófica llamada «Franceses, un esfuerzo más si queréis ser republicanos», donde expone a detalle sus principales planteamientos.

Después de la larga y absurda arenga, llega una carta del padre de Eugenia advirtiendo de la llegada de su esposa (ya saben qué esposa) a casa de la señora de Saint-Angé, quien está preocupada de que su hija esté en semejante compañía.

Al entrar ésta a escena, es desnudada, golpeada, violada, vejada y torturada con crueldad. Un criado sifilítico es mandado traer para que la contagie de tan temido mal, prometiéndole que al hacerlo con una mujer "limpia" se curaría; éste no pierde el tiempo y la viola con ayuda de Eugenia.

Una vez inoculada la sífilis, es preciso asegurarse de que no pueda lavarse, así que la infibulan en el coño y el ano cosiéndola con un grueso sedal lacrado antes de correrla a patadas de la casa para que muera de una manera lenta.

Es curioso que, qunque la novela parece estar basada levemente en los "Diálogos de Luisa Sigea" de Chorier, diez años antes se habia publicado en Francia "Las amistades peligrosas" de Laclós, que entre su temática incluye el aleccionamiento y perversión sexual de una inocente.

La Filosofía en el tocador no es propiamente una novela erótica; es más bien un diálogo filosófico en donde intervienen, de vez en cuando, escenas eróticas muy fuertes.

EUGENIA, poniéndose un consolador: ¡Oh, encantada! Nunca me cogeréis en falta cuando se trate de libertinaje: ahora es mi único dios, la única regla de mi conducta, la única base de todas mis acciones. (Encula a Dolmancé.) ¿Es así, querido maestro?... ¿Lo hago bien?...DOLMANCÉ: ¡De maravilla!... ¡Realmente la pequeña bribona me encula como un hombre!... ¡Bueno! Me parece que ya estamos perfectamente enlazados los cuatro; ahora sólo se trata de seguir adelante...SRA. DE SAINT-ANGE: ¡Ay, me muero, caballero!... ¡No puedo acostumbrarme a las deliciosas sacudidas de tu hermosa polla!...DOLMANCÉ: ¡Rediós! ¡Qué placer me da este culo encantador! ¡Ah! ¡Joder, joder! ¡Descarguemos los cuatro a la vez!... ¡Rediós, me muero, desfallezco!... ¡Ay, en mi vida me correré con más voluptuosidad!
Sade era un pornógrafo que a base de construir orgías revelaba las monstruosidades del ser humano.




Perversógrafo: Sexo vaginal, anal, oral, masturbación, orgías, incesto, homosexualidad, objeto sexual, anticlericalismo, beso negro, dedo en el culo, flagelación, crueldad, sadismo, trios, lesbianismo, coprolalia, blasfemia, pedofilia, sexo en el pelo, en las axilas, en las tetas en los muslos, entre las nalgas, matrimonio abierto, coprofagia, bisexualidad, infidelidad, tortura, dildos, beso negro, golpes.





La filosofía en el tocador
Marqués de Sade
Tusquets Editores
La Sonrisa Vertical SV 59
Octubre 1988
ISBN: 978-84-7223-362-1
208 pág.

martes, 2 de agosto de 2011

La filosofía sadeana; indroducción a La Filosofía en el tocador

Sade nuevamente ¿Qué fijación tengo con la pornografía sadeana? Pornografía es pornografía y toda es igual, ¿No?.........bueno, no.....es más, les prometo hoy hablar de filosofía, y dejar la pornografía para la siguiente entrada.

En 1795 se publica de forma anónima "La filosofía en el tocador o Los instructores inmorales", una extraña novela del marqués de Sade. Se trata de la segunda de sus tres novelas pornográficas (sin contar las 120 jornadas que hubiera sido la primera si se hubiera terminado), escrita cuando Justine o los infortunios de la virtud ya era famosa  y la más directa en el tratamiento de temas políticos; en ella podemos conocer la filosofía política sadeana en boca del principal narrador: Dolmancé, alter ego del divino marqués.

La novela fué escrita años después de la que fue su primera novela filosófica: Aline y Valcour, novela que incluye un relato de una isla utópica (Tamoe) y que nos presenta a Sade como un ser sensible en esa locura que fué la post-revolución en Francia; "el Terror". Pero "La filosofía en el tocador" no nos presenta a Donatien como un ser sensible, aquí lo tenemos como un furioso orador gritando su filosofía durante una orgía entre una eyaculación y otra.

El libro es toda una curiosidad dentro de las novelas pornográficas del marqués; en primer lugar, casi la totalidad del libro transcurre sin violencia sexual, incluso las contadas flagelaciones son consensuales, el nivel de sadismo es bajo y la tortura está excluida en casi todo el libro, no hay pedofilia explícita si se exceptúa a la chica de 15 años, ya púber. En segundo lugar, es curioso que el libro nos muestre la filosofía de Sade al desnudo, filosofía llena de errores y sofismas. Es como si la violencia verbal sustituyera la violencia sexual, como si Donatien hubiera intentado escandalizar usando argumentos y lenguaje relativamente moderados.

Para entender la crudeza de la novela, debemos tener en cuenta que Sade fue perseguido por igual por el viejo y el nuevo régimen. En la cárcel le toca asistir a cientos de decapitaciones, cosa que obviamente lo marca y le hace daño a su estado de ánimo.

Hay un error muy grande de comprensión del mensaje de Sade; se ha repetido hasta el cansancio que Sade era un liberal, que sus ideas eran de avanzada y que promovía el individualismo y el libre pensamiento. Que al oponerse a Leibintz lo empata en su manera de pensar a Hegel, a Voltaire o a Rousseau.... nada más alejado de la concepción del mundo que Sade nos presenta.

Como ejemplos, tanto Voltaire como Sade eran contrarios a la religión, a la que consideraban algo malo e indeseable que se debía prohibir en un estado moderno. Pero Voltaire era deísta, mientras que Sade era intolerantemente antiteísta, y llega en el libro a poner en el mismo plato el teísmo, el deísmo y la religión.

Sade no es un liberal, Sade no cree en el individualismo ni en la igualdad de toda persona. No entiendo cómo se atrevía a decirse republicano. Sade creía en un naturalismo ateo llevado al extremo, que no cree mas que en la maldad natural del hombre como depredador de sí mismo. Sade parece estarse burlando de la Revolución Francesa por sus endebles bases. Sade no cree en la igualdad, ni en la ley ni en la fraternidad.

En el quinto de siete diálogos, Dolmancé lee a los otros un libelo que se llama: "Franceses, un esfuerzo más para ser republicanos", una proclama política donde se pide ir más allá en el espíritu de la República. Es un panfleto contradictorio, extremo en sus planteamientos, en el que critica la religión, la idea de Dios, hace un ataque agresivo a Jesucristo (le llama tonto, imbécil, retrasado mental, etc) y la doctrina cristiana y pide que se haga una "descristianización" forzosa de la república y que se prohiba la religión. Para Sade, la religión es el sustento de todo régimen opresor.

Hace una negación de la virtud, diciendo que la virtud no existe y que sólo es una construcción social, que los crímenes más horrendos han sido virtudes en algún lugar y en alguna época de la historia, dice que todo hombre debe tener por ley derecho al vicio (pero por supuesto, nunca aboga por el derecho a la virtud). Aboga por el sexo libre y ataca la institución del matrimonio como algo que no debería existir, nos habla del relativismo del pecado y la virtud.

El incesto se defiende como algo natural y deseable, la conducta criminal es vista como una simple manifestación del espíritu humano, que no debería tener límites. Nos dice que la libertad del individuo y su derecho a la libertad en el obrar no están contrapuestos al derecho de cualquier hombre de tomar sexualmente a una mujer, así tenga que ser por la fuerza, si ésta se niega a darle placer; porque para Sade quien manda no es la razón del individuo sino su naturaleza.

En cuanto a la violencia; se opone a la pena de muerte, por considerarla una venganza absurda, inútil e ineficaz; "el gobierno no gana nada segando una vida para compensar una muerte"; expone la necesidad de hacer leyes dulces y abolir la pena de muerte. Esto no le quita al individuo la libertad para asesinar si sus pasiones así lo piden; Sade le niega al estado el derecho que le reconoce al individuo....algo parcialmente entendible porque Sade estuvo condenado a muerte y vio el horror de la guillotina.

El robo se presenta como un mal menor, con el poder de redistribuir la riqueza; pide por la libertad de conciencia y la libertad de prensa. Niega el individualismo, pero enaltece la libertad; desde ésta óptica Sade se muestra como un anarquista-materialista-radical. Para Sade, el individuo no tiene voluntad, es un títere que se acciona con el rodar de la naturaleza. Esto significa que –todo lo contrario del régimen ilustrado-, lo que hace Sade no es convertir a la persona en el centro de la política, sino de reducirlo a un animal más de la naturaleza.

Entre otras linduras, Sade defiende la destrucción de la autoridad familiar, la inexistencia de los lazos familiares, la falacia del amor materno, la superioridad de la sodomía sobre el acto sexual vaginal, la abolición del matrimonio y el gobierno de las pasiones sexuales en la vida humana, critica la piedad como una forma de debilidad social porque corrompe la bondad natural al limitarla imponiendo virtudes. Critica la caridad, la castidad y la decencia, porque al ser actos egoístas no tienen valor y se deben evitar; "...los pobres están allí para que los fuertes y los poderosos se aprovechen de ellos".

Ataca a la familia; nos dice que el gobierno debería suprimirla, educando al individuo desde pequeño y pervirtiéndolo si así se desea y conviene a los intereses de quien administre el gobierno.

Algo que me pareció muy cómico es que en la orgía se encuentra un jardinero al que hacen aparecer como un retrasado, un mero objeto sexual para apagar los deseos de sus amos. Antes de comenzar a leer un panfleto revolucionario le hacen salir de la habitación, diciéndole que por naturaleza no le incumbe dicha lectura, y que cuando continúen con la orgía lo harán llamar. Es cómico porque contradice el espíritu de igualdad que debería privar en una arenga republicana. No creo que sea intencionalmente cómico, más bien es uno más de los errores y sofismas del libro.

Otro punto curioso es la intolerancia hacia la heterosexualidad, definiéndola como una aberración y un error. Uno de los personajes que se define como heterosexual, en realidad "prefiere" las mujeres, pero no por ello deja de tener amantes de ambos sexos. Sin embargo hay un momento en que Dolmancé se niega a tener sexo vaginal por considerarlo contrario a sus principios, entonces todos le dicen que es una decisión que se debe respetar.

El tono moralizante de Sade no se puede tomar en serio, pero en éste libro la carga pseudofilosófica y pseudocientífica sí llega a ser chocante. La filosofía en el tocador es un delirio absurdo lleno de extravagancias. Es una larga disertación político-moral con orgías incorporadas aquí y allá.

Continúo enseguida....